Ya hace varios años que pasan por mis manos informes de presencia, reputación, y percepción de marcas de producto, marcas corporativas, pero también marcas personales como las de políticos, directivos o famosos. A excepción del caso de los personajes políticos, el resto de marcas siempre han sufrido alteraciones con el tiempo ya que sus responsables a partir de los indicativos que anpro21 les ofrecía modificaban su forma de comunicar para llegar mejor al público. Es incluso gratificante ver como una gráfica evoluciona mejorando los valores de una empresa, ya que delata el trabajo de un equipo humano que lucha para lograr los objetivos propuestos. En cambio esto nunca pasa cuanto el informe es sobre un personaje del entorno político de nuestro país. A pesar de que año tras año, ya sean por las elecciones generales, autonómicas o locales, la historia siempre se repite “los candidatos no son bien percibidos por la sociedad” y las gráficas muestran valores siempre bajos. No confundir reput